lunes, 13 de septiembre de 2010

Múltiplos de tres

En apenas tres años se han destruido 30 millones de empleos en el mundo, lo que hace que existan unos 210 millones de personas en el mundo en desempleo. Se calcula que unas 1.200 millones de personas no llegan a ganar lo suficiente para mantener a su familia por encima del nivel de la pobreza.


Y las noticias se empeñarán en las próximas semanas de lanzar mensajes positivos en cuanto países y comunidades autónomas obtengan dos trimestres consecutivos de crecimiento del PIB de su economía. Variable técnica para poder decir que se ha salido de la recesión.

Cuando lo digan, centenares de miles de los oyentes de radio y televidentes, los que aún no cambian el canal cuando empiezan las noticias, se revolverán en el sofá, el mueble más usado de las últimas semanas, en el que se refugian después de haber ido a llamar a innumerables puertas.

El paro de larga duración y el agotamiento de las prestaciones y ayudas hacen mella en la economía doméstica y en la moral, circunstancia que mina la convivencia en el seno familiar y siembra tensiones en el ámbito social.

Para todos ellos, y muchos otros, la noticia del crecimiento de la economía no significará nada si no encuentran empleo. En su situación, cada momento que pasa les hace perder la fe y la confianza en las instituciones y el sistema. A cada paso cobran más fuerza las malas tentaciones y los caminos de salida del agujero poco decorosos. En esas situaciones es más fácil caer en el alcohol, el tabaco, empezar a delinquir, defraudar...

En España se han destruido 2,7 millones de empleos y Rodríguez Zapatero ha ido hoy a Oslo a decir que su gobierno hizo lo correcto.

Con esa actitud no hará más que animar a una salida masiva a la calle el próximo día 29, pero sobre todo, dará alimento a todos los que insisten en estos días que es ya un cadáver político.

Quizás pueda tener razón de que no ha sido este gobierno el que nos metió en este lio, pero no pueden, por más que lo intenten ya no son capaces de encontrar un baúl lo bastante grande para esconder las certezas y pruebas de que lo han hecho, y lo siguen haciendo francamente muy mal. Medidas-parche que han enterrado a políticos, gestores, recursos financieros, ilusiones y costes de oportunidad que echaremos muy de menos en los próximos meses.

Después de la recesión de los noventa, España, a pesar del impulso europeo, tardó 12 años en recobrar el ritmo. España presumía en foros internacionales de haber alcanzado el primer nivel. Si ahora Zapatero va a Oslo a pedir dinero argumentando que ha tomado las medidas anticrisis que se le pidió, no es una vergüenza, en realidad tiene esa obligación.

A la vuelta tendrá que decir que nos engañó, que no éramos tan fuertes como decíamos y que en la realidad, eramos un castillo en el aire. Tendrá que decirlo, aunque eso lo eche ya del poder.

1 comentario:

Juan N. dijo...

Felicidades por el post. Como tu dices: "ya no son capaces de encontrar un baúl lo bastante grande para esconder las certezas y pruebas de que lo han hecho, y lo siguen haciendo francamente muy mal".

En la página http://loquenosdiceelgobierno.blogspot.com puedes encontrar una "memoria histórica" de lo que han hecho (poco) y de lo han dicho (mucho y contradictorio) en los últimos años.

Saludos,
Juan N.