Martinis

Una reflexión para el arranque de una semana que promete ser agitada y que en realidad nos apetece en el fondo, a los que nos gusta que la vida así lo sea. Pero una semana en la que la prima se nos puede subir a la parra, y hacer como los gatos, maullar desconsolados, mirando con tristeza desde las alturas hacia abajo, como si no hubiesen sido ellos solitos los que hubiesen trepado hasta allí, puede ser una semana demasiado dura de llevar.

Entre tanta carrera y tropelía de asuntos, bien vale la pena no agitarse demasiado y recordar la condición del agente secreto inglés más famoso cuando pedía una copa. Pero eso, una, no vaya a ser que repliquemos a Dorothy:

Me gusta beber un martini,
Dos como máximo.
Después del tercero, estoy debajo de la mesa
Después del cuarto, debajo de mi anfitrión.
Dorothy Parker