Hace tiempo que dejé de intentar entender
la guerra dialéctica en la que en ciertos aspectos se ha transformado la reivindicación
que de la mujer hace la Junta de Andalucía. Esa que se comenzó diciendo que era
una defensa para la mujer y para evitar su exclusión social y laboral, que se
transformó luego en una discriminación positiva y que en la práctica ha llevado
a crear todo un entramado y equipo de gente especializado en revisar cualquier
texto y/o documento que se emite desde la Junta y otras administraciones
públicas para que en todos/todas los/las casos/cosas se recojan los aspectos
masculinos y femeninos.
Quizá la barrera a este, en cierta medida
despropósito, deba ponerlo la RAE cuando tenga que recordar que en las
escuelas, los/las niños/niñas siguen aprendiendo lo que es y para que se
utiliza el neutro.
Está bien si aporta, ayuda y sirve para
algo. Y es muy cierto que ésta, a veces lucha por la defensa y reivindicación
del papel de la mujer en la sociedad ha tenido y tiene sus dificultades en un
entorno definido en gran medida por hombres. Es un hecho que durante muchos
años la vida pública ha sido definida por varones. Las personas somos
egocentristas y banales. La definición de los términos y conceptos de vida
social han acabado siendo masculinos en la mayoría de los casos. Es una
cuestión que debemos, tenemos que mejorar.
Lo que es más complejo de entender son las
contradicciones y las salidas de tono dentro de este marco conceptual cuando
nos encontramos con errores garrafales en documentos que proceden de la propia
Junta de Andalucía. Como el que acaba de tener algún responsable del IFAPA de
Chipiona (Cádiz) en la edición y difusión de un cartel de una jornada sobre
comercialización de producción ecológica. Habla por sí solo.
A mi me parece de especial interés el
contenido de la jornada. Me parece un acierto su programación y en un momento muy
oportuno. La agricultura ecológica tiene que irrumpir con fuerza en los hogares andaluces, hace falta, al campo, a los ciudadanos. Eso es un tema, otro distinto es la manera conceptual en que debe llevarse a cabo.
Dado que se trata de una jornada de comercialización,
sólo me queda una duda que resolver. Con esa campaña de comunicación, ¿A qué
perfil de cliente potencial se dirige la jornada?
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