viernes, 17 de diciembre de 2010

Aire

Ha resultado ser el protagonista de todo mi día: el aire. Hoy soplaba quizás más frío, más inhóspito que de costumbre, la moto me ha enfrentado a él a lo largo de una mañana veloz, intensa y luminosa. Suerte que no eché en falta aire de cola, cálido, ese que inflama las velas.

En Sevilla se está celebrando en estos días Air2010. He tenido la suerte de escuchar a Van Jones, me ha aportado un importante soplo de aire nuevo a los esquemas mentales. A los que nos fijamos también en la calidad oratoria y expresiva del ponente, a los que entendemos la comunicación como una conexión personal nos ha dejado deslumbrados. Un par de bocanadas de su charla: “Cada uno de nosotros tenemos actualmente en nuestras manos, con nuestros portátiles, con nuestros teléfonos, ipod, iphone, smartphone, blackberry,…, más tecnología de la que tenía Estados Unidos cuando llevó por primera vez el hombre a la luna”.

Otra, “Es posible construir un mundo nuevo si empezamos a construirnos nosotros mismos”.

Las siguientes citas me llevaron en volandas de un lado a otro. Las prisas hicieron que me desorientase, me perdiese y acabase en la calle Aire. Uno de los rincones más bellos y desconocidos del centro de Sevilla. Según los datos geológicos y arqueológicos (y mitológicos añadiría), la zona de más altura sobre el nivel del mar de la ciudad histórica, por tanto la primera tierra que emergió de las aguas. Cernuda ha sido uno de sus residentes ilustres.

Con tal vehemencia el viento
viene del mar, que sus sones
elementales contagian
el silencio de la noche.

Solo en tu cama le escuchas
insistente en los cristales
tocar, llorando y llamando
como perdido sin nadie.

Mas no es él quien en desvelo
te tiene, sino otra fuerza
de que tu cuerpo es hoy cárcel,
fue viento libre, y recuerda.

Me faltó parar a mediodía para coger aliento, ese que suele echarse en falta al final de la jornada. No tuve pausa para coger un poco de aire, Aire, aire/ no una brisa sino un torbellino de aire,/aire, aire.../que se lleve a los monstruos/que se han hecho dueños/de todos los sueños/que fueron razón.

En cambio, estuvimos hablando toda la tarde de la energía que el hombre obtiene de este recurso inagotable. Tuvimos una larga reunión sobre energías eólicas. Cuando acabamos y salimos a la calle, el aire ya andaba inmerso en oscuridad.

Ahora, sólo una cosa pido, que todo lo que he aprendido, no se lo lleve el aire del amanecer.

2 comentarios:

rocio dijo...

Bonita reflexión y los versos de Cernuda

Antonio Aguilera N dijo...

Ciertamente Cernuda es para leerlo, despacio, muy despacio. Te recomiendo el siguiente enlace Rocio:
http://amediavoz.com/cernuda.htm