Aviso, jaque

La falta de rentas del trabajo en demasiados hogares españoles está poniendo en jaque a las administraciones públicas y a aquellas entidades dedicadas a la ayuda de los más desfavorecidos. Cáritas atendió en 2008 más del 50% de personas que el año anterior, las demandas eran principalente de alimentos básicos, un 89,6% y de ayudas para el pago de hipotecas y alquileres, un 65,2%. Lo espectacular es que el 52% de los atendidos, eran personas derivadas desde los ayuntamientos.

En relación a sus iguales, los UE-15, España sigue estando en las últimas posiciones de gasto público por habitante, lo que evidencia carencias en sanidad, educación, vivienda social, escuelas de infancia, servicios a personas con dependencia, servicios sociales, etc. Considerando la media de la Unión Europea, estamos siete puntos por debajo. Realizando otra comparativa, descubrimos que el PIB per cápita en España es del 94% en relación al promedio de la UE-15, sin embargo el gasto público social por habitante es del 74%.

Según el profesor Vicenç Navarro, “España es un gigante económico con pies de barro sociales”. Según un estudio de la fundación FOESSA, de media en 2008, el número de prestaciones de los principales programas de garantía de ingresos mínimos, fue de 4.437.335, donde el complemento de mínimos de pensiones, el subsidio por desempleo y las pensiones no contributivas fueron las de mayor importancia.

Si la guerra entre la crisis y la sociedad se materializara en una partida de ajedrez, este otoño, la crisis volvería a dar un nuevo aviso de jaque, esta vez apuntando a la base del llamado estado de bienestar, y a este cada vez le quedan menos peones, alfiles y torres para defenderse cuando el déficit público crece peligrosamente y cuando muchos de los empleos que se están creando y se crearán en los próximos meses están dentro de la economía sumergida cuestión que no da acceso a la cobertura social. En América Latina saben ya bastante de esto, 7 de cada diez empleos creados en los últimos veinte años corresponden a economía sumergida, bastantes países que se creían en el pelotón de cabeza podrían estar siguiendo el mismo camino.

Es necesario saber que, en términos globales, el estado de bienestar en estos momentos sólo protege al 8% de la humanidad.