Al igual que vienen haciendo los colegas ingleses desde hace años, las ferias ornitológicas, entendidas como herramienta para fomentar este incipiente mercado, empiezan a desplegar su potencial en España.

Mañana, jueves 18, se inaugura la “Feria Internacional de las Aves” en Tarifa, organizada por la Fundación Migres, y que pretende aglutinar a todos los relacionados con el gremio: Empresas de turismo ornitológico, librerías, agencias de viaje, fabricantes de material óptico, asociaciones, fundaciones, entidades públicas. Todos ellos con el objetivo de captar la atención de los, cada vez, más aficionados a esto de salir al campo a ver pájaros.

Las fechas y el entorno son ideales, pues, en estos días, el fenómeno de la migración llega a su punto culminante, y en la zona del Estrecho de Gibraltar se pueden observar una de los espectáculos más fascinantes de la naturaleza, que aglutina a una de las mayores cantidades y variedades de aves de todo el planeta. Todo un éxtasis para el habituado a echar toda una jornada y apenas ver tres o cuatro especies de rapaces. En una mañana de estas en el estrecho pueden observarse unas veinte distintas, ¡ y por centenares ¡.

El mercado de la ornitología en España está dando sus primeros pasos, y aún está por explotar y explotarse. Aquellos que sepan anticiparse y entender lo que el aficionado demande tendrá el éxito asegurado. Ahora bien, es necesario ir más allá de convertirse en guía ornitológico, ofrecer excursiones, vender material divulgativo o llevar a anillar al cliente.

Será necesario buscar proyección internacional, anglosajona principalmente, ir de la mano de la administración pública, gestora y responsable de los principales enclaves donde ejercer la actividad, aliarse con ongs, entidades que han de servir de padrinos y que tienen fidelizados a miles de aficionados. Y a todo ello, imprimir un carácter de profesionalidad e innovación que garantice la supervivencia económica del proyecto.

Se está empezando, queda mucho por hacer, prueba de ello han sido las múltiples dificultades, internas y externas, de organización que ha tenido la feria, que mañana abre sus puertas. También me consta, que muchos vienen a la feria de las aves, como el profesional del sector que quiere conocer las últimas novedades y también lo que oferta la competencia, establecer contactos y conseguir clientes. Aunque aún, en la prensa, no se hable del volumen de negocio que generará esta feria, como se hace ya con numerosas ferias y congresos sectoriales. No se duerman, ya hay bastantes que la miran con esos ojos.